Haroldo de Campos (1929-2003) es uno de los poetas brasileños más significativos de la segunda mitad del siglo XX. Su obra se despliega en dos grandes movimientos, en el sentido sinfónico del término. El primero, su etapa concretista, abarca la poesía que produjo entre las décadas de 1950 y 1960; el segundo está signado por la etapa neobarroca y de largo aliento a la que pertenece Galaxias, su obra más ambiciosa. La aspiración de Haroldo de Campos en este libro tiene en Mallarmé y sus diferentes enunciados sobre un único Libro su punto de partida: componer un libro de libros regido por las tribulaciones del barroco y los ritmos alucinantes y posconcretos del trópico. La vastísima cultura y la capacidad inventiva de Haroldo de Campos se reitera a lo largo de los cincuenta canto de este poema, que por sus dimensiones podría considerarse como una revisión puntual de las vanguardias literarias y artísticas que predominaron en Occidente durante la primera mitad del siglo XX.Quizá podamos resumir la enorme influencia que ha tenido Haroldo de Campos en el panorama de la poesía actual si mencionásemos solamente unas cuantas líneas de su biografía: Julio Cortazar se basó en él para uno de los personajes de Un tal Lucas (1979). De su prolongado intercambio con Roman Jakobson, resultó el ensayo del lingüista ruso titulado “Carta a Haroldo de Campos sobre la textura poética de Martin Codax”. Jacqes Derrida le dedicó un texto donde se lee : “en el horizonte de la literatura, y antes que nada en la intimidad de la lengua de las lenguas, cada vez tantas lenguas en cada lengua, sé bien que Haroldo ha tenido acceso a todo ello antes que yo, mejor que yo”.